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  • That means I win

    Hace mucho que no leo Count your Sheep, pero algunas cosas no pierden vigencia…

  • La venganza inmortal

    La venganza

    Llega el día de San Valentín y uno se empieza a sentir un poco pegajoso. Sí, bueno, los 40º de sensación térmica seguramente no ayudan, pero con tantas publicidades y afiches empalagosos ya de romántico se cruza el límite a lo pesado. En estas oportunidades no viene mal, como dice Paso de los Toros, “cortar con tanta dulzura”, así que el libro “La Venganza Inmortal” es una buena dosis de amargura para atravesar esta semana equilibradamente.

    El libro junta las mejores frases que distintas personas le dedicaron a sus ex-parejas desde el portal mandaleunmensajeatuex.com. Con cinismo y humor, nos muestran a los diferentes tipos de “ex” (y estoy segura que todos tuvieron, por lo menos, uno de ellos). Como esta joyita:

    Me hacés acordar a Cortázar. A la plaza, linyera roñoso.

    Amargura pura. El libro está a la venta en las librerías, pero además el mismo día de San Valentín van a “liberar” algunos ejemplares en el parque Tres de Febrero como una acción de “bookcrossing”, junto a unos gigantes muñecos vudú.

    ¿Yo? Creo que lo mejor es hablar con el ex todo lo que haga falta hablar y seguir adelante, nada de rencores ni resentimientos. Y que el amor se demuestra cada día del año, no solo el 14 de febrero, que todo junto empalaga. Así que, más que feliz día de los enamorados, prefiero desearles una vida llena de amor.

  • Asociaciones

    Despertar

    Una de las cosas que más me fascinan del cuerpo y la mente humanas es la capacidad que tenemos de condicionarnos ante ciertos estímulos, y que esa asociación de eventos perdure mucho tiempo después.

    Por ejemplo, yo tengo una política de despertarme con canciones tranquilas. Los sobresaltos a la mañana con el clásico “piripipí” a todo volumen no me gustan. Cuando decidí empezar a poner música tranqui en el despertador, una de las canciones que elegí fue Buachaill on Eirne, de The Corrs. Muy suave y además en un idioma que no conozco. Ideal. Me encantaba despertarme así.

    Claro que despertarse significa muchas cosas, y más en la vida de una universitaria en su último año de clases. Significa interrumpir preciosas y escasas horas de sueño, saber que hay un día larguísimo por delante, que hay que afrontar el frío de Buenos Aires en invierno por la mañana, y, algunas veces al mes, salir del estupor del sueño para tomar consciencia amargamente que hay examen y que solo quedan un par de horas para terminar de repasar.

    Es así como Buachaill on Eirne, aún agradable para mis oídos, empezó a generarme una serie de sensaciones no tan agradables en el cuerpo. Si iba por la calle y sonaba en mi iPod, en seguida la cambiaba. Si aparecía en mi reproductor multimedia mientras trabajaba, inmediatamente me sentía nerviosa y una sensación de frío me bajaba por la espalda.

    De hecho hoy, a un par de meses de haberme recibido y saber que ya no me esperan esos despertares llenos de preocupaciones (quizás vengan otros, con otras preocupaciones, pero ya no esos), cuando me cruzo con Buachaill on Eirne tengo que cambiarla. Porque mi cuerpo se condicionó, mi mente lo asocia con esas épocas y no quiere saber nada al respecto.

    Así nos pasa con todo. Un lugar, un tono de voz, un perfume, una frase. Lo mejor es cuando nos pasa, pero en positivo. Cuando algo se asocia a un momento tan bueno de tu vida que, cuando aparece en el presente, nos evoca sensaciones placenteras por más que estemos caminando en el microcentro con 45º de sensación térmica.

    Quiero más de esos.

    Foto.

  • Diálogos (IV)

    Estuve un rato tirando y agarrando una pelotita con la mano derecha, bien. Mano izquierda, fail.

    Yo — No tengo habilidad con la mano izquierda.

    Padre — No tenés habilidad.

    Yo — …

    Padre — Pero es verdad. Lo descubrimos hace mucho cuando jugabas al vóley en el colegio.

    Yo — Nunca vamos a volver a tocar ese tema.

    De todas formas, tiene razón. No sé jugar al vóley mejor de lo que sé manejar un avión comercial. Pero no vamos a volver a tocar nunca ese tema.

  • Tenemos que hablar

    Me pasa 9 de cada 10 veces:

    [Vía Sedated]

  • El cáncer del corazón

    «Las críticas no son otra cosa que orgullo disimulado. Un alma sincera para consigo misma nunca se rebajará a la crítica. La crítica es el cáncer del corazón.»

    Agnes Gonxha Bojaxhiu (alias: Madre Teresa de Calcuta)

    Vía: Que la pases lindo!

  • Corazón

    Heart

    Sí, estoy bastante de acuerdo.

    La foto es de Laughing Squid (no se imaginan lo que me costó tipear eso medio dormida), y la vi porque la compartió Nico en GReader.

  • Las grandes mentes…

    Great Minds

    Esta es una de mis frases favoritas, y la con la que trato de regirme antes de abrir la boca (o poner los dedos en el teclado).

    Vía: Flower Power

  • La creación como cura–OFM

    El acto creativo requiere lo originario. Creativo porque crea sentido, no "descubre". Y originario porque no tiene fundamentos, no hay nada detrás, de ahí llega la inspiración. Las palabras en sí tienen función creadora.

    El descubrimiento llega luego, y ahí hacemos teorías y explicaciones.

    Para llegar a ese momento de creación es necesario desandar ciertos caminos, despojarnos para hacer una captación holística de la realidad. Prescindir de los objetos, despojarnos del Yo.

    OCTAVIO FERNÁNDEZ MOUJÁN plantea un ICC holístico (el del PA abierto). En él se plantea la des-sexualización sublimatoria, el ir más allá del narcisismo ilusorio de la realidad representada. Ya no estamos en el plano de lo moral sino de la ética.

    Es igual al ICC cultural vivo, de allí surge el poder de lo creativo.

    Hay una lógica de lo difuso, sin fronteras precisas, llena de satisfacciones, de sentido. Indeterminada.

    El acto creador supone estar fuera de la tendencia natural a la repetición.

    En nuestro caso, al haber ampliado el ICC, damos cabida a la posibilidad del azar. No obstante, proponemos continuar la tarea sobre la creatividad para convertirla en acto existencial que nos encaminará por la senda de la salud, construir un “siendo”: identidad de persona.

    Vicisitudes del acto creador:

    1. La fractura (de la estructura individual y colectiva previa)
    2. Liberación de energía y aparición del poder
    3. Suspensión del Yo
    4. El contexto de creación o identidad grupal
    5. El acto existencial de la creación
    6. La libertad de crear

    La creación tiende a ir más allá del proceso de des-sexualización pues supone la suspensión del Yo, y por lo tanto de sus relaciones objetales.

    La sublimación tiene que ver con el descubrimiento.

    La cura corre grandes riesgos cuando se confunde sublimación con creación, pues la fuerza transformadora se ignora y tiende a suplantarse por la idealización de aspectos del mundo representado.

  • Mi balance de 2009

    Collage S

    Es el día. Todos nos ponemos a pensar qué hicimos (y qué no) durante los últimos 12 meses, y las sensaciones pueden ser de lo más variadas.

    En mi caso, 2009 fue uno de los años más difíciles de mi vida, pero también el que más logros me trajo.

    Dentro de lo malo, no me voy a explayar demasiado, pero dificultades económicas, peleas familiares y vaivenes sentimentales no me faltaron. Parece poco, pero la intensidad de esas situaciones fue grande, muy grande, sumadas al estrés propio de terminar la carrera, que por más que sea algo lindo, llegar hasta ese punto te agota física y mentalmente.

    Dentro de lo bueno, tengo mucho que agradecer. Crecí mucho como mujer, me hice nuevos y geniales amigos, vi a mi blog crecer y crecer, y fui (y soy) feliz cada día trabajando en Bitelia, Gizmóvil y PuntoGeek. Me siento acompañada por una cantidad impresionante de gente en Twitter, y aunque parezca una tontería, a mi me llena el corazón la buena onda que tienen mis followers y el poder compartir con ellos desde trivialidades hasta sentimientos profundos.

    También llegó Simón a casa, mi gato, que lo encontramos en la calle y lo trajimos a casa pensando que en el mismo día lo vendría a buscar su familia. Y ahora es un Saia más.

    Y, por supuesto, me recibí. ¿Qué mayor logro que ese para coronar un año? El camino fue duro y los últimos meses hubo días que me sentaba a llorar de noche solamente por lo agotada que estaba. Pero valió la pena, mil veces valió la pena. (Aunque extraño ver a mis compañeros todos los días.)

    Por último, pero no por eso menos importante, termino el año a la espera del viaje al CES 2010 en Las Vegas. Seguramente dedique un post aparte para eso, pero me pone contenta en tantos niveles diferentes que no sabría por dónde empezar.

    Así que, 2009, empezaste horrible y terminaste hermoso. Gracias por hacerme crecer :)